
Queríamos un patio donde sentirnos agusto y tranquilos, por ello, comenzamos por la esquina, donde hicimos una especie de chill out con palets reciclados.
Asimismo, decidimos poner césped artificial, para una mejor sensación. Y por supuesto, optamos por un jardín vertical que le da muuucho color a la pared. Sin olvidarme del toldo para evitar el sol directo. Obviamente, en la otra zona del patio decidimos poner una pérgola, con su conjunto de sillas y mesa donde disfrutar de una deliciosa barbacoa en compañía. Espero que os guste!