
Hace tiempo que mi mujer y yo llevamos queriendo darle un cambio de look a nuestro dormitorio.
Al final nos decidimos por cambiar la pintura del cabecero por un papel pintado en tonos grises, imitando la madera.
Las herramientas que hemos usado:

Así era nuestro cabecero... pintamos los filos de la pared en blanco, para que no se viera el color berenjena por los filos del papel pintado.

Colocamos cinta de carrocero en todo el contorno de las otras paredes para no mancharlas de cola.

¡Y comenzamos a colocar el papel!... ¡Daba miedo meterle mano al principio!, pero no es para tanto...


Y aquí el resultado final, ¡menudo cambio!

Mi mujer y yo hemos quedado encantados con el resultado. Pensabamos que iba a ser mucho más dificil colocar el papel pintado, pero la verdad es que nos ha sorprendido lo rápido que ha sido y sobre todo, lo bien que nos ha quedado.
¡Espero que os guste el resultado!