Lo desmonté, lo metí en casa y le apliqué Oxirón limpiador. Después lo enjaboné, lo aclaré y lo sequé bien. Más tarde le di una mano de imprimación y, finalmente, tres capas de spray antioxidante con esmalte para aluminio. Quedó impecable, y todo de forma fácil y rápida. Las pinturas de brocha para aluminio tardan mucho en curar, así que con el spray ahorré tiempo y obtuve un resultado excelente. ¡En solo 10 minutos ya se podía volver a pintar! 🥰