Tenemos una terraza exterior pequeña pero con grandes ideas. Una barra y taburetes abatibles para tener siempre sitio, sofás rinconeros, mesa ligera...
Así hicimos nuestra terraza:
Colocamos césped artificial en el suelo para darle calidez y comodidad.
Para montar el sofá compramos madera natural con las medidas deseadas (nos las cortaron en la tienda de Leroy Merlín), hicimos unas patas con unos listones gruesos.
Añadimos unos cojines perfectos, mullidos que invitan a relajarse.
En la pared del fondo instalamos un jardín vertical decorativo, con el cesped que nos sobró del suelo y con plantas artificiales y lo enmarcamos con una guirnalda de luces LED para un toque acogedor por la noche.
Completamos el espacio con una barra alta abatible de madera hecha a medida y una lámpara de fibras naturales que le da un aire bohemio y relajante.
Ahora es nuestro pequeño oasis al aire libre.