

🦋 El jardín donde despiertan los sueños🌊
Quería abrir los ojos cada mañana y sentir que estaba en un jardín con vistas al mar, donde las mariposas revolotean con la primera luz del sol. Y como los sueños están para hacerse realidad, decidí crearlo con mis propias manos.
Para hacer este cabecero, primero elegí tablas de madera, las lijé y las pinté en blanco con un acabado envejecido para darles ese aire rústico y acogedor, buscando ese efecto desgastado que recuerda a las casas junto al mar. Luego, coloqué las tablas de forma irregular para simular una vieja valla de jardín. Como broche final, añadí mariposas con la técnica del transfer, integrándolas en la madera como si realmente estuvieran posadas ahí, listas para echar a volar.
Pero faltaba algo más: el mar. Para que la escena estuviera completa, recorté un cuadro en tres partes, adaptándolo a la medida exacta del cabecero y convirtiéndolo en una ventana imaginaria hacia un océano sereno. Ahora, cada mañana, despierto en mi propio jardín frente al mar, con mariposas que parecen susurrar que el día empieza con suavidad y calma.