Cada vez que llegaba a casa, en la entrada me recibía un antiguo y desgastado mueble como único elemento visible de mi pasillo. Salta a la vista que se trataba de un típico mueble de almacenamiento donde he podido guardar aquellas cosas a las que no daba uso habitualmente, llegando incluso a convertirse en el soporte de una pecera durante un tiempo. Había llegado el momento de darle un buen lavado de cara y, por lo tanto, modernizar el recibidor de mi casa con un mueble único.

Para hacerme una primera idea, pensé en los materiales que existen en el mercado para realizar un gran cambio con un ajustado presupuesto: papel pintado, una madera al más puro estilo vintage, pintura y unas prácticas ruedas. En cuanto redacté mi lista de materiales, me puse manos a la obra.
Los materiales y herramientas que he necesitado son los siguientes:

1. Limpiar y lijar a fondo
En primer lugar, tuve que limpiar a fondo el mueble y, a continuación, lijarlo cuidadosamente para poder pintar todas las partes visibles. Siempre teniendo en cuenta este paso como imprescindible para ésta y otros tipos de restauración, ya sea pegar papel pintado o aplicar barnices.

2. Pintar y barnizar
Una vez que tuve el mueble lijado por completo, procedí a pintar el mueble con dos capas de pintura en color blanco. En cuanto estuvo seco, le di una capa de barniz incoloro, para conservar el buen estado de la pintura con el paso del tiempo.

3. Encolar y empapelar
Para darle ese toque especial que andaba buscando, escogí un papel pintado con motivos florales, perfecto para renovar el estilo del mueble con unos simples detalles. Para utilizar este tipo de papel, en primer lugar tuve que encolarlo al completo con ayuda de una brocha, al mismo tiempo que iba pegando el papel pintado. Una vez que estuvo seco, quité todo el sobrante con la ayuda de un cúter y unas tijeras.

4.Tratar con madera
Para ganar unos centímetros en altura, barnicé el tablero de madera OSB cortado a medida para el soporte y la encimera del mueble respectivamente. En cuanto se secó el barniz, usé el adhesivo de montaje para pegar ambas maderas, dejándolo secar durante 24h.

5. Cajones y puerta
Llegado a este punto, el mueble iba cogiendo color gracias únicamente a la pintura y el papel pintado. Pensé que lo ideal sería instalarle una puerta y dos cajones con sus respectivos tiradores, cada uno distinto al resto.

6. Sobre ruedas
Una vez que tuve el mueble casi listo, sólo faltó ponerle unas ruedas, usando tornillos y arandelas de la medida adecuada. Instalé dos ruedas sin freno en la parte trasera y dos ruedas con freno en la parte delantera con la ayuda de un atornillador eléctrico. De esta manera, puedo desplazar el mueble por cualquier entorno de la casa en función de lo que necesite.

7. Decoración estilo vintage
Por último, con el mueble prácticamente restaurado, solamente faltaba ponerle los detalles decorativos: dos cestas de mimbre para tapar los huecos sobrantes, una lámpara con un aire vintage a juego con el mueble, una bombilla decorativa, un cuenco para dejar las llaves cuando llegas a casa y, para darle un toque de color y olor, un ambientador. Así daba por finalizada mi pequeña “obra de arte”.

Espero que te haya gustado el paso a paso de esta restauración. Todos en casa estamos encantados con el resultado: una imagen renovada de nuestra entrada gracias al lavado de cara de un antiguo mueble.
Te animo a que veas el proyecto mueble bar de TonyGarcía , ya que es otra forma de restaurar un mueble antiguo, ¡Seguro que te puedes inspirar en su proyecto!
Si tienes pensado hacer tu propia restauración te animo a que lo compartas en el apartado Proyectos y si quieres compartir tus dudas utiliza el apartado Foro bricolaje.