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A veces la mejor manera de aprender a hacer algo es directamente haciéndolo.
Buscando la manera de hacer unos sujetalibros yo mismo y con material reciclado, enseguida mis compañeros se animaron a darme consejos y material sobrante. Así que a continuación os presento este sencillo proyecto de dos sujetalibros.
¿Qué hace falta?
Lo primero es rescatar del olvido unos trozos de madera, de esos que de otra manera acabarían en la basura. Y con restos de pintura, pegamento, escuadras de ensamblaje y unos stickers abandonados vamos a crear unos maravillosos sujetalibros.
¿Cómo se hace?
En primer lugar hay que cortar los trozos grandes de madera en otros más pequeños. Podemos usar una sierra circular o una caladora.
Pegaremos los trozos de madera para que hagan la forma de escuadra necesaria para cumplir con su función de sujetalibros.
Después con unos pinceles pintaremos la madera. Usaremos pintura gris, que siempre pega, y otra mostaza, muy a la moda.
Por último pegaremos los stickers de imitación oriental en el mostaza y colocaremos con tornillería las escuadras en el gris.
Y voilà, ya tenemos nuestros sujetalibros.
¿Y para qué m****e sirven?
Pues nada más hay que ver el antes y el después en una leja de una habitación.
O lo bien que queda el sujetalibros mostaza para organizar en una mesa de escritorio.