Era muy mobiliario que compré para una casa muchisisimo más grande de en la que estoy ahora, así que habia que adaptarse a las nuevas circustancias. Todo el mundo me decía : ¿De wengue a blanco ? ¡¡ Estas loca ¡¡¡ 
Pues, lo que hice fue aprovechar justo ésa circustancia y teniendo en cuenta que sabia que no me iba a quedar perfecto.. pues decidí darle un aspecto envejecido, éso que llaman ahora llaman... vintage. jaja.
No estaba muy por la labor de lijar,entre otras cosas, por que carezco de ésa paciencia, asi que lo primero que hice fué quitar los tiradores y darle dos capas de imprimación para que la pintura posterior agarrara bien, con una brocha, las esquinas y demás y luego el resto con un rodillo de ésos de espuma. Lo deje secar y al trabajo fino.
Por que se lava todo mejor , por la ausencia de olor y sobre todo por el tipo de acabado que queria darle, me decanté por una pintura acrilica color blanco mate..
Y empezamos... . una capa, dos capas, tres capas y ¡¡ hasta cuatro¡¡ Ay, es que era muuuy negro, jaja. Todas estas con el rodillo de espuma y la ultima le dí con una brochita para que se me marcaran los brochazos. Cuando secó lije con una lija gordita los cantos y un pocó por frentes y laterales y demás, ahí sin piedad, fué lo donde entra el momento inspiración...
Para los cajones y traseras del mueble me decanté por empapelarlo con un papel blanco con unos detalles en malva que quedaban ideal con la decoración que ya tenia.
Y ......salón nuevo y muy muy luminoso.
Lástima que no tenga más fotos de cómo estaba antes.
Espero que os guste... tengo más cositas que ya iré subiendo.




Materiales
Imprimacion al agua de madera.
Rodillo espuma
Brocha.
Pintura al agua blanco mate.
Lija
Papel pintado
Cola para empapelar