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Me encantan los baúles con forma de cofre porque además de estéticos son prácticos, ya que puedes guardar cualquier cosa en ellos y tener tu casa recogida. Ocupan muy poco espacio. Yo en este caso lo he usado para mis zapatos.
Lo pinte en un azul súper enérgico y que iba a destacar en cualquier lugar. Lo personalice con una canva vintage que da la bienvenida a casa, elegí este porque la ubicación del baúl es en la entrada de casa.
Materiales:
Paso a paso:
1. Seguir las instrucciones que nos facilita el fabricante del cofre, ya que son muy sencillas y fáciles de seguir.
2. Separar las piezas siguiendo el croquis de montaje para que nos sea mas fácil el montaje.
3. Lijamos las piezas con la ayuda de la lijadora, para que luego quede un acabado perfecto, evitando rugosidades y astillas al tacto.
4. Una vez pintadas unimos las piezas con los tornillos y el destornillador, es muy sencillo. El baúl tiene hecho las marcas hechas ya en las piezas para facilitarnos el trabajo.
5. Échale imaginación, y decóralo como más te guste ya que lo podrás adaptar a cualquier estancia de tu hogar. Es súper versátil al venir la madera en bruto.