Comunidad
Todos tenemos en casa un mueble, un espejo, un objeto al que le tenemos especial cariño y si no le damos un poco de mimo parece estar colocado en una triste trastienda. Yo tengo una cómoda con su espejo y dos mesitas de noche que son bandejas de desayuno importados de la India. Han lucido tal cual los compré más de diez años y ahora se me ha ocurrido darles una nueva vida... Es un trabajo delicado y de paciencia pero el resultado merece la pena.
Estos eran mis muebles antes de poder presumir:
apoyado sobre una pared muy tenue...
un papel demasiado oscuro...
Estos son los materiales que he necesitado, además de un papel pintado más alegre y romántico que veréis a continuación:
Yo suelo aprovechar los restitos que van quedando por casa de otras cosas y esto es lo que necesitáis:
Procedimiento:
Yo he medido para que el papel sobresalga desde el borde del mueble 20cm, luego una línea plata de 10 cm y la línea blanco crudo que tiene 15cm (mi referencia ha sido el espejo a la hora de medir pues, de este modo, la composición queda mucho más equilibrada). Podéis elegir otras medidas pero con estas queda muy bonito. Es muy importante medir igual por todos los contornos del mueble y trazar a lápiz cada uno de ellos. Por eso os digo que la preparación es lo más laborioso. Luego es ir colocando elementos: papel y líneas de pinturas.
Este es el resultado:
¿A qué ya no parecen los mismos? Pinté la pared de azúl índigo, cambié el papel pintado del cabecero y con los restos he jugado, no sólo para realzar esta bonita cómoda sino para poner sobre la misma papel y para no tener que encolarlo pues es ratán y quedaría con bultitos, le he puesto un cristal de pocos milímetros, al igual que las mesitas de noche. ¿Os gusta? Yo cada vez que lo miro me alegro más de haber hecho esta transformación.
Consejos:
El esmalte plata está dando de si porque ya puesta en la tarea, me dije voy a colocar otros detalles plateados y pinté estos dos marcos que estaban en nogal; como el cuadro ya estaba montado, no hace falta desmontarlo, ponéis cinta de carrocero normal en el cristal y pintáis el marco, no es necesario dar imprimación porque así las muescas de la madera y la veta, si la tiene, se conserva. Una vez seco, y retirada la cinta, si ha quedado algun resto, con la rasqueta de quitar el hielo al coche sale genial, no hace falta disolvente y no raya el cristal, mirad:
¡Pero sin miedo! Es el trabajo de una mañana o una tarde que no sepáis como ocupar el tiempo y seguro que cualquier rincón de vuestra casa os está pidiendo un realce.