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La vida de mi hijo, como la mía, es un ajetreo. Si unimos a eso este repentino interés por las manualidades se entiende la necesidad de crear un horario semanal para decorar la habitación del pequeño, así como para organizar la semana.
El proceso puede ser tan largo como uno quiera, pero barato y sencillo es sin dudarlo.
Horario infantil de pared
MATERIALES:
Un cocho de pared
Chinchetas
Abecedarios de distintos tamaños, colores y de goma eva
Cola de contacto
Dibujos (que los puede hacer uno mismo si se le da bien, que no fue mi caso)
Forro
Goma eva en láminas
Una caja de cartón pequeña (la mía era de suero fisiológico para bebés, pero estuve a punto de coger una de manzanilla)
Bote de pintura azul luminoso
Brocha
Pegamento de barra
Tijeras
Colocamos el corcho sobre una mesa y medimos, decidiendo cuánto espacio repartir para cada día de la semana. Yo dejé tres días arriba, y el resto abajo, con el fin de semana en un hueco más pequeño a la derecha. Después con el abecedario de goma eva grande fui "escribiendo" los días de la semana y pegando. Cuando ya tenía creadas las etiquetas y horas, con el abecedario de goma eva pequeño titulé el horario arriba del todo, en el marco del corcho. Por fin, el corcho ya se podía colgar a la pared con unos ganchos fáciles, de esos que puedes poner casi con el dedo.
Pegamos las letras de goma eva, grandes y pequeñas.
Para las etiquetas: primeramente seleccioné distintos dibujos por Internet (médicos, clases, paseos, etc.), los imprimí, coloreé, pegué sobre las láminas de goma eva con pegamento de barra, después los recorté y los forré (como podéis ver en las imágenes). Y lo mismo con las horas. Luego, es tan sencillo como clavar las chinchetas en las etiquetas, organizando horas y días con las diversas actividades.
Pegamos todo en goma eva y recortamos cada etiqueta.
Cortamos forro a la medida idónea y posamos la etiqueta boca abajo.
Por los lados pegamos el forro y lo recortamos a ras.
Son horas de trabajo, pero ¡tenemos etiquetas para cada actividad!
Después, pensé que necesitaba poner las etiquetas que no estuvieran siendo usadas en algún sitio, y qué mejor que allí mismo, para tenerlas a mano. Cogí una caja de cartón pequeña y la pinté de azul. Cuando estuvo seca, introduje las etiquetas y la cajita de chinchetas e introduje el cartón del cierre entre el corcho y su marco, de modo que la caja queda fija.
Pintamos la caja.
Introducimos el trozo de la caja de cierra entre el corcho y su marco.
Mi bebé es pequeño como para poder colaborar, pero si se os ocurre hacer algo así para vuestros peques seguro que se lo pasan pipa coloreando, pegando y en definitiva creando las etiquetas, y el resto del horario, que además, desde pequeños los ayudará a saber organizarse de forma divertida.
¡Nosotros ya no llegamos tarde ni nos perdemos ninguna cita! ¡Lo tenemos todo planeado!