Isla móvil para la cocina

Os enseño como ha quedado mi isla móvil con dos cajoneras que me sobraron al adaptar una cocina de un piso a otro.

Este lado es el que da al comedor y por dentro es igual a los muebles de cocina.

He tenido que adaptar la cocina de un piso que hemos dejado, al que vivo en la actualidad y tras darle muchas vueltas a la distribución de los módulos me sobraban dos, una cajonera y un cacerolero. Estas piezas tan preciadas por su gran almacenamiento no podía desperdiciarlas por lo que pensé en hacer una isla con ruedas para poder adaptarla al espacio según conviniera el momento.

Estas son las piezas que me sobraron:

Materiales utilizados:

Tirafondos
Sellador de madera
Puntillas finas
Láminas de contrachapado de 1.
Listones de madera de pino
Taco de lija
Imprimación para madera
Pintura a la tiza blanca
Agua
Barniz incoloro satinado

Herramientas utilizadas

Destornillador
Martillo
Sierra de calar
Ingletadora
Nivel de burbuja
Brocha Plana
Rodillo
Paño de algodón

A continuación os dejo el paso a paso del proceso:

Primer paso: He unido con tirafondos ambas cajoneras para que ganaran en fuerza.

Segundo paso: He cortado los sobrantes de madera de la trasera de los cascos para que quedaran todos a la misma medida.

Tercer paso: Forrar el bloque con las maderas, para ello he utilizado para la parte trasera y laterales unos tableros de contrachapado, los he cortado a la medida y pegado con un hilo de sellador al rededor y unas puntillas finas.

Cuarto paso: Cortar los listones a la medida de la encimera y plantear dejando el menor espacio posible entre ellos, una vez planteados los pego a los cascos con sellador y puntillas finas en las esquinas.

Quinto paso: Lijar todas las maderas, tanto los listones como el contrachapado, haciendo hincapié en las terminaciones y las esquinas, ya que de los cortes es donde más astillas e irregularidades encontraremos, hay que lijar hasta eliminar todas las imperfecciones por completo.

Sexto paso: Dar una imprimación al agua a toda la madera, esperamos a que seque bien y volver a lijar, en esta ocasión con lija fina.

Séptimo paso: Diluir la pintura a la tiza blanca en agua, yo he elegido diluir en bastante agua (dos partes de agua por una de pintura) porque mis listones tenían un veteado precioso que no he querido tapar y he elegido la pintura a la tiza por el efecto que vi en la bricopedia de @ManuelCarvajal Lo aplicamos primero con la brocha por los filos y esquinas y después extendemos con el rodillo por toda la superficie. Dejamos secar y damos tantas manos como queramos, yo he dado solo una mano por que quedó uniforme y efecto translucido tal y como quería.

Octavo paso: Volvemos a pasar una lija muy fina, aplicando pasadas suaves y por último damos una capa de barniz incoloro para proteger la madera, yo he elegido satinado por que le aporta un matiz que personalmente me ha parecido más elegante.