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En esta ocasión hemos renovado el aspecto de nuestra mesa de cocina con un original pavimeto cerámico que además combina con la cocina de estilo rústico. Para este sencillo proyecto hemos necesitado:
Nuestra mesa tiene unas medidas de 120cm x 53cm y cada baldosa tiene una medida de 40cm x40cm, lo cual nos ha facilitado el trabajo, ya que estas estaban dividadas por dibujos de 20cm x20cm. Esto nos ha permitido ajustar los cortes por las mismas lineas que sepan los distintos diseños.
Hemos usado 7 baldosas de pavimento cerámico y dos perfiles de aluminio cepillado en mate de 2 metros cada uno.
Primeramante hemos colocado las baldosas en la mesa y hemos medido marcando los diferentes cortes.
Una vez marcadas las baldosas hemos pasado a cortarlas con la cortadora manual de cerámica de forma que los diseños queden enteros teniendo en cuenta las juntas y la medida del perfil (1cm de grosor) para que se ajuste a la superficie del tablero de la mesa.
Después de colocar de nuevo las baldosas ya cortadas en la mesa, hemos pasado a medir el perfil para cortarlo en escuadra. Para ello hemos utilizado una ingletadora para marcar los cortes y a continuación lo hemos cortado con una amoladora para que el corte salga limpio.
Ya listas todas las piezas a colocar hemos procedido a limpiar todas las superficies exahusivamente para facilitar la adherencia. Es importante que la mesa esté nivelada y su superfie sea plana sin endiduras que impidan el correcto asiento de las baldosas.
Con ayuda de una pequeña chupona hemos ido levantando cada pieza para proceder a verter unas gotas de adhesivo por la superficie de la mesa.
Despues de pegar todo presinando ligeramente hemos dejado secar 24h.
Al dia siguiente hemos preparado la pasta para juntas con un poco de agua hasta conseguir una consistencia de una papilla y hemos cubierto todas las uniones con ayuda de una espátula.
Una vez seca la pasta hemos limpiado toda la superficie y ¡listo!
Así luce actualmente nuestra cocina con una renovada mesa con cubierta cerámica :