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Mi cocina tiene ya unos años. Después de pintarla varias veces en tonos claritos, hemos decidido darle un toque más llamativo y original pintando una pared de pintura pizarra negra. Además de aplicarse muy fácil, sólo tienes que esperar 30 minutos para que seque. Con darle dos capas nos ha quedado la pared lisa y totalmente negra, con el efecto pizarra muy conseguido.
Al ser una pared que había estado pintada antes, me aconsejaron, antes de utilizar la pintura pizarra, aplicar una imprimación y esperar unas 5 horas para empezar a pintar. Decidimos pintar sólo una pared para darle un toque nuevo a la cocina sin oscurecerla tanto. Pero el efecto es increíble, además le da un aspecto más elegante.
Utilizamos un bote mediano con el que, además de pintar una pared de unos 5 metros cuadrados aproximadamente, hemos pintado los protectores de enchufes y botes de cristal, sobre los que hemos puesto los nombres de su contenido.
Con esta pintura puedes escribir con tizas que se quita muy bien. Eso sí, mejor que las tizas sean de las buenas, ya que puede rayarte un poco la pared y dejarte marcas.
Nos ha quedado la cocina súper chula y muy original, ¡nos encanta!
Materiales
- Pintura pizarra negra
- Imprimación
- Rodillo pequeño
- Bandeja para escurrir rodillo
- Pack de brochas (diferentes tamaños)
- Cinta protectora