Experiencia nefasta con trato, instalación y posventa de la tienda Leroy Merlin en Tomares (Sevilla).
Compré suelo laminado y contraté instalación que fue realizada sin profesionalidad ninguna, donde ha dado incidencia y problemas con el consecuente destrozo en el hogar. Se ha reclamado a tienda, a personal y se limpian las manos. Estuvieron 2 años dándome largas con 0 argumentos y ahora dicen que expiró la garantía.
Los instaladores fueran la empresa sevillana Diego Sobrino de Sevilla. Informales, cada día venía un instalador, solo alguno con experiencia; el resto, aficionados.
En Leroy Merlin, desde los jefes de tienda, responsables por 24h porque nunca es el mismo, poca profesionalidad, poca educación y nulo conocimiento, además de las formas inadecuadas de trato al cliente. He abierto reclamación y no admiten arbitraje. Por supuesto, voy a continuar reclamando donde ellos dicen que debo hacerlo y, por supuesto, publicando la experiencia vivida por la poca y nula profesionalidad. Además de difundir por todas las vías para hacer llegar a las personas la vulnerabilidad de derechos ante problemas con estos incompetentes.
Públicamente, Miguel Ángel Romero, personal de suelos en la tienda Leroy Merlin en Tomares (Sevilla), es un impresentable, sin dar la cara y solo contestando a emails, que obviamente, he impreso para presentar en la reclamación.
Por favor, no hagáis caso a las supuestas garantías, son mentira. Sale infinitamente mejor contratar a profesionales que no sean subcontratados de Leroy Merlin. Jamás se van a hacer cargo de sus meteduras de pata.
0 recomendación ni, obviamente, volveré a contratar con ellos nada