El 2 de marzo se pagó una puerta acorazada con su correspondiente instalación. Después de quedar con nosotros y dejarnos tirados varios días, nos hicieron una auténtica chapuza. Uno de los encargados de la tienda nos dijo que vendría un carpintero (uno profesional, no como los vinieron) y a día de hoy seguimos sin saber nada del asunto. Hace más de tres meses que se pagó esta puerta y su instalación. He perdido días de trabajo por culpa de este carpintero impresentable, numerosos disgustos, idas y venidas a la tienda prometiéndonos que lo arreglarían y Leroy Merlin sigue sin hacerse cargo de la situación. Espero que le pongan remedio de inmediato.
leroymerlin.es
