En mayo 2019 compré un rodapié que enseguida se reveló de calidad pésima, al ser forrado con papel no idrorepelente que al intentar limpiarlo se desprendió dejandome la casa un desastre. Por suerte que por ley el producto está en garantia durante dos años! He contactado muchas veces el servicio de atención al cliente, y al cabo de 4 meses conseguí hablar con un chico de nombre Daniel Pino, el cual me propuso el reembolso de los €180 pagados por el producto defectuoso. De acuerdo con él, pedí un tiempo para pensarmelo y al cabo de unas semanas le contesté que aceptaba el reembolso. Pero - increíble! - Daniel me pidió que fuese a la tienda de Sabadell con el rodapié defectuoso, si no no será posible la devolución. Eso significa que, a parte de la pérdida de tiempo para solucionar el problema, al final yo habría pagado por la instalación del rodapié defectuoso, su desinstalación y, por supuesto, para la instalación de un producto nuevo. Estáis jugando a tomarme el pelo? Nunca he tenido tantos problemas con una tienda de bricolage como con vosotros. Desaconsejadísima, nunca volveré a comprar en Leroy Merlin.