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Cuando reformamos una casa por completo, siempre hay elementos que podemos rescatar para darles una nueva función. La reutilización de elementos viejos o usados también es parte de la filosofía del reciclaje. Tan sólo hace falta un poco de imaginación y ganas de contribuir a la sostenibilidad de nuestro planeta. Además, si empleamos productos ecológicos y apenas sin olor, la contribución es mayor. Es por eso que yo siempre procuro elegir las Ecopciones para mis proyectos.
En esta ocasión, al rehabilitar una casita junto al mar, decidí guardar dos hojas de contraventana . A continuación, te cuento paso a paso, cómo hacer un cabecero de cama a partir de una antigua contraventana de madera. Verás que es muy sencillo y te puede servir de inspiración para hacer modelos diferentes con dos ventanas o puertas antiguas.
Material y herramientas que necesitarás:
Paso a paso
1. Desmonta la contraventana
El primer paso es descolgar la contraventana de su ubicación original. Las bisagras al estar algo oxidadas, conviene que le apliques un poco de aceite lubricante para poder sacarlas.
Una vez desmontado, el siguiente paso es eliminar todos los elementos metálicos de las contraventanas, como bisagras, pestillos y clavos. Para ello, utiliza destornilladores y un alicate.
En el caso de piezas muy oxidadas, aplica de nuevo un poco de aceite lubricante para facilitar la extracción de los tirafondos originales.
Al eliminar todos los elementos metálicos, observa si hay alguna pieza interesante que se pueda guardar. Puede ser un pestillo antiguo, una cerradura original o una bisagra diferente. Los puedes aprovechar como elementos decorativos una vez restaurados o guardarlos para otro proyecto. En mi caso, no había ninguna pieza interesante o antigua. Por lo tanto y como hago siempre, los deposité en un punto limpio del municipio.
2. Unifica las dos hojas de contraventana
Con las dos hojas de madera ya limpias, el siguiente paso es realizar un armazón de madera para unirlas.
Realiza el armazón con listones de madera de pino. Uno de ellos debe ir en la unión de las dos hojas. A cada lado del cabecero coloca también otro listón de la misma altura de las contraventanas. Finalmente, coloca un último listón en la parte alta del cabecero de lado a lado.
Para fijar bien los listones a las hojas de la contraventana, emplea cola para madera y pequeñas escuadras de acero fijadas con tirafondos. De este modo, el conjunto queda rígido y estable.
3. Prepara la superficie
Una vez seca la cola para madera, el siguiente paso es preparar la superficie para después pintarla. Tanto los agujeros de tornillos como las uniones, séllalas con una masilla para madera de color blanco. Este tipo de masillas son muy interesantes para estos trabajos, ya que son muy fáciles de aplicar. Otra de las características es que se lijan sin esfuerzo y se pueden pintar y barnizar.
Una vez seca la masilla, aplica una mano de lija fina a toda la superficie y después retira bien el polvo producido. Para crear un fondo blanco homogéneo, aplica dos manos de imprimación Todoterreno. Es un material que empleo en muchos proyectos y siempre da muy buenos resultados. Para pintar una contraventana como esta, te recomiendo que emplees una brocha con punta, ya que al tener tantos recovecos, te facilitará la tarea de pintar.
La imprimación ayuda a cubrir algunos defectos de la madera y también sirve como fondo blanco para crear después el efecto gastado o envejecido. De todas formas, en mi proyecto, no he querido cubrir del todo las marcas por el uso y paso del tiempo.
4. Aplica el color
Para este trabajo, decidí emplear un esmalte para muebles al agua. Su aplicación es muy sencilla y la gama de colores es infinita. Apenas se percibe el olor a pintura y las herramientas se limpian con agua. Sobre la capa de imprimación aplica dos manos de pintura, dejando secar entre una mano y otra.
5. El toque envejecido o vintage
Con mucha paciencia y con la ayuda de una hoja de lija, realiza el efecto desgastado. Para ello, pasa la lija con cuidado lama por lama y también en el contorno del cabecero. Al lijar la pintura azul, dependiendo de la intensidad, sacarás a la luz el fondo blanco o incluso el color original de la contraventana.
Una vez conseguido el efecto envejecido que desees, retira bien todo el polvo producido ayudándote de una brocha y la aspiradora.
Como los esmaltes son pinturas de acabado, no es necesario dar ningún barniz protector. Pero si quieres que quede más resistente o dar más brillo, puedes aplicar encima un barniz incoloro mate, satinado o brillante.
5. Colocación
Con el cabecero ya terminado, el último paso es colocar dos hembrillas en la parte posterior para poder fijarlo a dos escarpias colocadas en la pared. Eso evitará que el cabecero se mueva.
Aprovechando que colocaba un cabecero nuevo, decidí dar un aire nuevo a una cómoda y dos mesas de noche. Estaban ya algo anticuadas y tenían un revestimiento de melamina imitando a madera que no me gustaba. Tú también puedes hacer algo parecido.
Como puedes ver, dar un cambio radical a un dormitorio reutilizando y reciclando muebles es algo muy sencillo y gratificante. Colaboras con la sostenibilidad de nuestro planeta sin dejar de lado la decoración de tu casa. Tan sólo necesitas ganas de hacerlo y algo de imaginación.
Otra pintura que puedes emplear para este tipo de trabajos es la pintura a la tiza o chalky paint.