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¿Recordáis uno de mis últimos proyectos “Un cuarto de baño renovado”? Bueno, pues se me han ocurrido más ideas para darle ese toque especial que lo haga único. Mi osadía al meterme en este tipo de trabajos viene de la mano de mi amiga Mari Ángeles que dice que la ostentación y los objetos grandes no achican un ambiente, lo embellecen y que hay que atreverse con todo. Sin miedo a estropear, sino con ilusión de crear.
Bueno, pues hacía meses que compré un librito de pan de oro para este menester y ahora creo que ha llegado la hora de realizarlo.
Materiales:
Primero preparamos la superficie a pintar, como veis son los muebles sphera que compré en Leroy Merlin y el pan de oro va en el interior de los círculos. Así que ponemos cinta de carrocero y remetemos un poquito porque aunque el pan de oro lo voy a dar también en los bordes interiores no quiero que el exterior del mueble se manche. Luego aplico la imprimación y dejo secar 2 horas.
Tras ese tiempo, aplico con brocha o pincel el barniz mixtión y antes de que se seque pongo el pan de oro. Normalmente se hace con una brocha especial para ello que se llama “polinesa”, como yo no tengo, pues voy a usar brochas de maquillaje que son muy suaves para manipular, alisar y retirar el sobrante de pan de oro. Una vez hecho esto, procedo a aplicar el barniz incoloro, dejo secar (otras 2 horas según instrucciones del fabricante) y aplico el betún de judea y antes de que se seque, con el trapito suave retiro sobrante para darle ese aspecto envejecido. Y voilà!!!!!!!!!!!!!!! Ya está terminado.
Me lo he pensado mucho porque los muebles, que me encantan, son de inspiración algo sesentera pero muy actuales y meterle algo tan clásico como el pan de oro me daba miedo. Pero creo que ha valido la pena, a mí me encanta (aunque no sé lo que opinará el que diseñó el mueble…jajaja).
Espero que os sirva la idea!!!! Un abrazo.
Y, por cierto, tiene mucho trabajo, sobre todo al ser una superficie vertical y con el hueco de dentro, si no lo habéis probado nunca empezad por algo sencillo como un marco o algo así. Yo aún ando en mantillas en esto del pan de oro, pero me hacía mucha ilusión hacerlo en este espacio.
Brico-Consejo: cuando retiréis la cinta de carrocero, si os quedan restos en los bordes, quitadlos con la espátula del congelador. Así no rayamos el mueble ni tenemos que aplicar productos agresivos, se va de maravilla...