Comunidad
Llevábamos meses y meses dándole vueltas a cómo podíamos darle otro aire a la puerta de entrada de casa, para ganar privacidad y modernizarla al mismo tiempo.
Pero había una cosa que teníamos clara: No queríamos ni seto, ni brezo ni similar. El sol lo acaba secando, los perros lo van arrancando y no se ve bonito para una puerta. Así que mirando y mirando... Nos pusimos manos a la obra. Esta es la puerta del cambio:
Le pusimos ese retal de malla de ocultación para evitar estar tan expuestos a la gente que pasa por la calle y no os imagináis las ganas que tenía de perderlo de vista. Así que recurrimos a los paneles de ocultación en madera trenzada. Como las medidas vienen predeterminadas y no cuadraba con exactitud con las de nuestra puerta, pintamos los marcos en negro con pintura Oxiron.
Pusimos un panel a cada lado de la puerta y los atornillamos al marco de la puerta de origen con tornillos métricos.
Como colofón, pintamos también el numero de la casa. Como podréis ver en la foto, era de latón, en el mismo color de la puerta. Y aprovechamos para darle una mano también al buzón. ¡Y aún así nos sobró pintura Oxiron!
¿Qué os parece este cambio?