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Reforma de una terraza acristalada: colocar un friso de madera
Con las paredes y el techo pintados y el suelo renovado, el siguiente paso en la reforma sin obras de nuestra terraza acristalada fue colocar un friso de madera de pino natural en la parte inferior de la pared. La idea era darle un toque cálido y natural al espacio, que antes era muy frío (por el ladrillo y las baldosas). Elegir madera fue todo un acierto: la textura del material y la calidez que respira eran justo lo que necesitábamos.
El revestimiento está formado por lamas machihembradas de 2 metros de longitud, que cortamos a una altura de 120 cm en la pared de la derecha. A la izquierda forramos la parte inferior de las ventanas con piezas de unos 65 cm de altura. Los materiales y herramientas que se necesitan para este trabajo son:
- Revestimiento de pino natural con nudos (3 paquetes)
- Adhesivo de montaje
- Pistola de silicona
- Guardavivos de madera de pino
- Barniz acrílico incoloro mate
- Sierra de mesa o de calar
- Guantes
- Mazo de goma
- Escuadra y lápiz
- Brocha ancha y plana
El primer paso fue medir y cortar las lamas a la medida. Con la escuadra, marcamos el corte a 120 cm. Las piezas sobrantes de las lamas las podremos utilizar para el revestimiento de las otras dos paredes, más bajito. Para cortar la madera se puede utilizar una sierra de calar, pero si tenéis una sierra de mesa tardaréis menos de la mitad. Esta máquina es un tesoro, y muy fácil de utilizar. Eso sí, siempre con gafas de protección y todas las medidas de seguridad.
Para mantener las lamas en la pared mientras se secaba la cola, se nos ocurrió un sistema muy eficaz: utilizamos una lama sin cortar y otra cortada para sujetar el friso y hacer presión contra la pared. El otro extremo de la lama (a la izquierda, en la foto no se ve) hacía tope contra la pared de enfrente. En algunos puntos usamos también cinta de carrocero y sargentos para sujetar las lamas. Por cierto, estas se encajan unas con otras introduciendo la pestaña de un lateral en la ranura del otro. Más fácil, ¡imposible!
Las dos paredes con ventanas tienen un borde que nos permitió encajar las lamas, sin tener que hacer presión para que se pegaran. Una vez colocado todo el friso, terminamos rematando la pared de la izquierda con un guardavivos de madera de pino. Los extremos se cortan a inglete con una caja y una sierra de arco o de costilla. Lijamos el corte, pegamos y encajamos. El resultado fue impecable:
Es importante proteger la madera con un barniz o un tapaporos. Nosotros elegimos un barniz acrílico incoloro y mate, y lo
aplicamos con una brocha especial para barniz. Con una sola mano, la madera queda protegida con un acabado invisible: parece que está al natural. Nuestra terraza avanza a pasos agigantados. Cada vez es más luminosa y acogedora… ¡Solo quedan los últimos toques! No os perdáis los próximos posts, en los que iremos desvelando el resultado final.
Materiales y productos:
Revestimiento de pino natural nudos
[Guardavivo de Pino 47x47 mm x 2,40 m (ancho x grueso x largo)](https://www.leroymerlin.es/v3/search/search.do?keyword=Guardavivo de Pino 47x47 mm x 2,40 m (ancho x grueso x largo))
[Barniz de interior LUXENS mate incoloro 0,25L](https://www.leroymerlin.es/v3/search/search.do?keyword=Barniz de interior LUXENS mate incoloro 0,25L)
[Brocha de recorte universal DEXTER PRO 21mm](https://www.leroymerlin.es/v3/search/search.do?keyword=Brocha de recorte universal DEXTER PRO 21mm)