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Desde siempre el hombre ha tenido la necesidad de medir el tiempo y lo ha hecho usando los astros y artilugios mecánicos. Uno de los objetos más simples y fiables son los relojes de arena, que permiten medir un intervalo de tiempo determinado. Aprende cómo hacer un reloj de arena de forma muy sencilla y económica reciclando materiales de uso cotidiano.
Para realizar el reloj de arena, necesitarás los siguientes materiales:
En cuanto a las herramientas, necesitarás:
1. C****orta las botellas a la altura que le quieras dar al reloj. Cuanta más altura, mayor intervalo de tiempo podrás medir.
**2. **Aplica un poco de adhesivo de montaje a una de las tapas y pégala a la otra. Deja secar el adhesivo.
3. Pega cinta aislante alrededor de las tapas para hacer la unión de las tapas más resistente.
4. Con un tornillo haz un agujero en el centro de las tapas y agrándalo con ayuda de un destornillador.
5. Para crear las tapas del reloj, dibuja en el cartón un círculo del tamaño de la botella, ayúdate de ella para trazarlo. Con un compás o una tapa de mayor diámetro que la botella dibuja otro círculo concéntrico. Realiza dos piezas iguales de esta manera y otras dos solo usando el diámetro del círculo mayor.
6. Recorta las piezas y unélas con la cinta aislante.
7. Coloca una de las tapas sobre una botella y únelas con cinta aislante.
8. Criba la arena con ayuda de un colador para evitar atascos de arena. Mézclala con la purpurina si quieres darle un toque diferente y divertido a tu reloj.
9. Rellena una botella con arena y mide con un cronómetro el tiempo que tarda en pasar a la otra. Tú eliges el intervalo de tiempo que quieres que mida tu reloj. Ayúdate con un embudo o un cucurucho de papel para echar la arena.
10. Coloca la otra tapa y únela con cinta aislante a la botella.
11. Para tapar la cinta aislante decora pegando cordón o lana con la cola termofusible.
Ya puedes disfrutar de tu nuevo reloj de arena, verás que sensación más relajante notas al mirar caer la arena de un receptáculo al otro.