Ocultación de cuadro eléctrico y nueva imagen de mi hall

¿Estás cansado/a de ver el cuadro eléctrico cada vez que entras o sales de tu casa?
Te cuento como lo he ocultado y como le he dado una nueva utilizad a una pared que estaba totalmente olvidada gracias al revestimiento de pared.

Los materiales que necesitamos para ponernos... ¡Manos a la obra!

Revestimiento de pared blanco
2 Listones de abeto cepillado, en mi caso lo necesito de 34 mm que es lo que sobresale la tapa del cuadro eléctrico
Esmalte al agua blanco
Rodillo de espuma
Bandeja para mini rodillo
4 Bisagras
Cierre de imán magnético
Adhesivo de montaje acrílico blanco
Tornillos para madera
Canto adhesivo de melamina blanco
Estante blanco de 60 cm.
Taladro
Broca de madera de 5 mm
Tacos de 5 mm

Ahora que tenemos los materiales, te cuento el paso a paso que he realizado:

Cortamos los dos listones de abeto a la altura que necesitemos. En nuestro caso hemos utilizado de base el rodapié, en el cual lo hemos apoyado.

Pintamos los listones con esmalte blanco para que queden totalmente oculto con el revestimiento y dejamos secar.
Calculamos la anchura que necesitamos para proceder a montar las lamas del revestimiento y que quede oculto completamente el cuadro eléctrico. En nuestro caso tenemos que fijar la lamas con el adhesivo para que no se deslicen, de este modo queda una puerta de una sola pieza. Como he tenido que cortar las lamas porque no me venía bien la medida, en el extremo le coloco el canto blanco adhesivo para que quede finalizado el panel.
También he tenido que dejar el hueco de la caja del timbre.
El revestimiento viene disponible por si quieres pintarlo en algún color y los hay ya disponible en diferentes colores. Yo he elegido dejarlo en blanco completo.

Volvemos a los listones una vez secos. Colocamos en uno de los dos listones el cierre de imán, que es el que va a conseguir que nuestra puerta se quede cerrada. En el otro listón colocamos las bisagras para fijar el revestimiento al listón, consiguiendo así que abra y cierre.

Pasamos a fijar los listones a la pared. Es importante hacerle el paso del tornillo antes a los listones con un taladro y una broca para madera. No hacer directamente para que así los listones no se fisuren.

Una vez fijo el revestimiento, a la altura que más nos guste, ponemos el estante blanco.

Para completar y que sea más funcional, a mi estante le he añadido en la parte posterior unos colgadores individuales que tenía de otro perchero. Hay muchos enganches individuales que puedes utilizar para crearlo.

Decoramos con los cuadros y plantas que más nos guste.

¡Listo! En pocos pasos tenemos una entrada actual y bonita.
Os comparto las fotos del antes y el después.

Espero que os guste tanto como a mí.
Un saludo.