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Hola, Este es un bricolaje sencillo y a nivel amateur, aunque requiere algo de tiempo.
Las puertas tenían unas molduras rectangulares como adorno, pero se las quité. Luego, con diferentes tipos de lijas, lijé toda la superficie, incluidos los bordes. Una vez terminado este paso, limpié el polvo y pinté con pintura blanca. Podéis usar las pinturas que más os gusten; en mi caso, aproveché una pintura blanca para garajes que me había sobrado del patio.
Es un proyecto que transforma por completo la apariencia de nuestras casas. Además, cambié los pomos, que compré en Leroy Merlin. Como los pomos antiguos habían dejado agujeros más grandes, tuve que rellenarlos con masilla y colocar una pletina para asegurar la instalación.
Espero que esta idea os sea útil para renovar puertas antiguas, desgastadas o desconchadas.