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Si queréis darle un cambio de look a una habitación, aquí os traemos nuestro rápido, sencillo y económico proyecto que consiste en cambiar de color las puertas de un armario y la entrada de una habitación con chalk paint. A simple vista es difícil imaginar lo mucho que puede cambiar una habitación pequeña cuando la pintas de blanco, pues si además lo haces también con las puertas, el cambio mejora aun más.
El motivo de utilizar pintura chalk paint fue por lo cómodo y rápido, ya que con menos procesos de tratado de la madera, conseguimos los mismos resultados.
Aquí los pasos a seguir:
Y aquí vemos el acabado final. Puertas en blanco que dan una sensación de mayor amplitud a la habitación.
Tras el pintado, lijado y eliminación del polvo, toca proteger con una buena capa de barniz y para ello lo mejor es utilizar el rodillo
Lo más cómodo, una lijadora con depósito de polvo.
Al menos será necesario aplicar dos capas de pintura.
Para las superficies lisas, lo mejor es utilizar rodillo de espuma.
Por comodidad, vale la pena utilizar destornillador eléctrico a igual que una lijadora eléctrica de hoja fina.
Puertas originales.
Pintado de puertas con pintura Chalk Paint y acabado con tratamiento de barniz.
Materiales utilizados: