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Darle una nueva vida a nuestras casas es a veces cuestión de pequeños detalles. En esta ocasión nos animamos a renovar todas las manillas plateadas de nuestra vivienda por unas de color negro que aportaban una mayor frescura y elegancia. En apenas cinco minutos por cada puerta y con cero dificultad, el resultados nos ha parecido muy vistoso y agradable ¡os cuento!
Todas las puertas de mi casa son blancas y venían con manillas plateadas convencionales. Al ser una vivienda bastante abierta, y con un estilo decorativo muy apoyado en elementos negros, decidimos sustituir todas las manillas por el modelo Inspire Sara de Leroy Merlin. Tiene una textura redondeada y un color negro mate que lo hace muy agradable al tacto y a la vista. La sustitución es pan comido
Lo primero que tenemos que hacer es retirar las antiguas manillas. Para ello basta con retirar el embellecedor - normalmente es de rosca - y a partir de ese momento se extrae la manilla sin problema retirando los tornillos y el pasador que conecta los dos lados de la puerta. Una vez hecho esto, es tan sencillo como seguir las instrucciones que vienen en el embalaje de las manillas de Leroy Merlin. Básicamente se trata de presentar las nuevas manillas, asegurar con un pequeño nivel que quedan perfectamente horizontales, y poner los tornillos (que también vienen con las manillas) para fijarlas a la puerta. Cuando está todo listo, solo hay que apretar un pequeño tornillo Allen que está en la parte inferior de la manilla para asegurar que la manilla abre y cierra con suavidad ¡Y ya estaría! Espero que os guste el resultado