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Restauración de cuadros con forma de capilla en pan de oro
Hace poco tiempo conseguí dos cuadros con forma de capilla en bastante mal estado. Eran de madera natural de color oscuro y tenían las pinturas muy sucias, aunque los colores en buen estado, eso sí. Pensé que dando un pequeño toque de dorado, tras una buena limpieza, les daría mayor luminosidad e iban a quedar bien.
Lo primero que quiero que veas es cómo estaban en origen. Tengo amigos que me comentaron que una antigüedad así simplemente la limpiarían y la dejarían como está. Reconozco que lo pensé, pero tras informarme y ver que no son realmente antiguas, me puse manos a la obra y decidí darles mi propio toque.
Antes de nada quiero contarte los materiales y las pequeñas herramientas que me hicieron falta:
- Pan de oro
- Pinceles finos
- Imprimación color rojo inglés
- Alcohol
- Algodón
- Barniz mixtión
- Goma laca
- Betún de Judea
- Trapo
- Aguarrás
- Polvos de talco
Voy a contarte paso a paso lo que hice para ponerlas a mi gusto:
1. Tras dar una buena limpieza a la madera y retirarle los iconos pintados, comencé a aplicar una buena mano de imprimación. Esta es bueno dársela en rojo inglés porque, con este color, se realza el resultado final en los dorados. Con un pincel pequeño me aseguré de que llegara todo el producto a cualquier rincón por muy inaccesible que fuera.
2. Limpié, por otra parte, las tablillas pintadas con los iconos de los ángeles. Con un algodón empapado en alcohol fui dando pasadas suaves de manera circular. Una vez limpio y seco pasé a ponerle una capa de goma laca, que dejé secar cuatro horas.
Pasado este tiempo le di otra más, dando por finalizado el tratamiento de las tablas. Al darle las dos manos de barniz se subió el color y ganaron muchas vistosidad.
3. Continuando con los marcos les di una mano de barniz mixtión y esperé 30 minutos. Este tiempo de espera es lo más normal para que se que quede casi seco pero aún pegajoso al tacto. Es lo que se llama mordiente en el mundo de la pintura.
4. Llegó la hora de poner el pan de oro sobre el barniz. Aquí tuve que echar mano de toda la paciencia posible. Muy despacio, con un pincel seco, fui depositando las finas capas y, a la vez, con las cerdas del mismo empujando para que se quedara en su sitio.
Cuando se manipula este tipo de producto hay que evitar incluso respirar fuerte, ya que se vuela con la más mínima corriente de aire. También hay que evitar tocarlo con los dedos porque se oxida con la grasa, que tenemos de manera natural, en las manos.
Dejé algunos rincones sin dorar intencionadamente para no dejarlo perfecto. A la hora de envejecer cualquier manualidad ayudan mucho ese tipo de pequeños "fallos", ya que dan aspecto de que ha pasado el tiempo por él, dejando su huella.
5. Hice una mezcla de betún de Judea y aguarrás al 50% para embadurnar bien todo por completo. Después, lo diluí para que no oscureciera mucho el resultado.
Sin esperar a que secara, con un trapo limpio retiré el exceso de producto. Gracias a eso fui quitando todo lo superficial y quedo más intenso por los rincones, dando mayor profundidad al labrado de la madera.
6. Para terminar, espolvoreé por encima polvos de talco y soplé con fuerza para retirar el exceso. Al hacerlo se quedó acumulado en los pequeños huecos y zonas menos visibles.
Este truco aporta una pequeña pátina, como polvorienta, dándole mayor aspecto de antigüedad a cualquier cosa que se quiera envejecer. Siempre debe realizarse justo al acabar, estando aún húmeda la pieza, para que se fije el polvo y seque con el betún.
Pues bien ya solo queda que veas el resultado. Esta es una imagen del detalle.
Y aquí tienes el resultado al completo, espero que te guste.
¿Te animas a hacer algo parecido y compartirlo con nosotros? Puedes hacerlo en nuestra sección de Proyectos, así todos veremos lo bien que te ha quedado. Si en cualquier momento te surge alguna duda, puedes planteárnosla en nuestros Foros, verás que rápidamente quedará resuelta.
Antes de despedirme me gustaría recomendarte la lectura de algunos proyectos relacionados con este tema y que me han gustado. Por ejemplo @mer2016 en su proyecto Pan de oro en el baño, ¿por qué no? nos enseña cómo le ha dado un pequeño retoque a los tiradores del mueble en el aseo de su casa. Por otra parte, @MayoLorda ha dado un nuevo aspecto a unos candelabros con pan de oro.
Finalmente cambiaré el estilo, dejando atrás el dorado, para proponerte el reloj metalizado en color cobre que ha hecho @Pedro_Ambrosia con un gusto excelente. Muchas gracias por tu lectura, ¡hasta pronto!
