Pregunta
¿Cómo mantener los pernios de una puerta?
Respuesta
Las piezas de metal articuladas que sujetan las puertas a los marcos se llaman pernios. Estos elementos sufren mucho desgaste y pueden provocar roces o chirridos, por ejemplo. Estos problemas pueden agravarse tanto por malas instalaciones e inclemencias del tiempo como por no prestar los cuidados requeridos. Descubre con los siguientes consejos cómo mantener los pernios de una puerta.

A diferencia de las bisagras, los pernios son piezas desmontables formadas por un macho y una hembra. A la hora de instalarlos, fíjate en el sentido de giro de la puerta. Hay pernios para la apertura de puertas a mano izquierda y otros para la apertura a mano derecha. Con el tiempo, estas piezas se desgastan tanto por el uso como por la inactividad.
¿Qué mantenimiento necesitan los pernios de una puerta?
1. Sitúate en la puerta que quieres revisar y ábrela del todo. Para engrasar los pernios necesitas acceder de manera correcta a ellos levantando un poco la puerta. Si está cerrada, esta tarea es imposible. Localiza un taco de aproximadamente un centímetro que servirá para calzar la puerta y acceder a los pernios.
2. Desencaja el pernio macho del hembra. Para ello, levanta con cuidado la puerta.

3. Calza la puerta. Hazlo con el taco que has preparado anteriormente.

4. Aplica lubricante. Coge un bote de lubricante y extiéndelo sobre la superficie del pernio macho que has dejado visible, con cuidado de no manchar la pared ni la puerta. Para evitar chorretones o que el producto gotee, se puede poner en un trapito, pañuelo o algodón y luego frotar la superficie del pernio.

5. Quita el taco con el que has calzado la puerta y ábrela y ciérrala varias veces. De este modo, compruebas que los chirridos desaparecen y la puerta funciona mejor.
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